“LA FRESCURA LLEGARÁ”

Por: Angélica Aguirre
Joel 2:
23 Vosotros también, hijos de Sion, alegraos y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo, y hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía como al principio.
El periodo agrícola de Israel comprende lluvia temprana, la lluvia intensa y la lluvia tardía. La temprana preparaban el terreno para ser sembrado, la intensa hacía que el terreno la absorbiera, se llenaban los estanques y manantiales. La lluvia tardía servía para completar la maduración del fruto.
De esta misma manera, Dios permite en nuestras vidas tiempos secos, tiempo de crecer, de madurar y de dar frutos, y del mismo modo Él nos promete estar con nosotros siempre, que nos enviará esa lluvia fresca, esa presencia de su Espíritu Santo que nos guie. Si miramos atrás y recordamos las temporadas de sequías que hemos tenido con algún problema, lucha o aflicción; podemos ver que esa agua refrescante siempre nos llegó, Dios ha sido fiel y de la misma manera que ha venido ayudándonos lo seguirá haciendo siempre y cuando estemos en comunión con El. Su bendición siempre nos llegará tal cual las lluvias tempranas y tardías prometidas a su pueblo.
En las Sagradas Escrituras encontramos muchas promesas relacionadas a esa bendición de su presencia en nuestras vidas y aquí de manera especial encontramos también esa presencia a través de su Espíritu Santo para que, a través de esas lluvias recibidas después de alguna sequía espiritual, podamos preparar el terreno para sembrar, llenarnos de su presencia y dar esos frutos de los cuales hemos sido llamados a producir. Dios te bendiga