“SEÑOR, SUPLE MI NECESIDAD»

Por: María de Díaz
Mateo 6:8
No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.
Desde que nacemos venimos con grandes necesidades; necesidad de alimentación, vestidos, protección, amor, cuidados, etc.
A medida que vamos creciendo las necesidades van aumentando en nuestras vidas, las cuales debemos suplir cada día como seres humanos; sin embargo, de todas las necesidades que el hombre pueda tener, la más importante es la necesidad de salvación del alma, esta necesidad sola puede ser suplida cuando se acepta a Cristo en el corazón. ¿Cuántos hogares necesitan al Señor? «Todos», porque Él no solo suple la necesidad de alma, sino las del cuerpo y las del espíritu.
Cuando suplas tu necesidad física, recuerda que hay una que solo Dios puede suplir.
«Dios te bendiga»